domingo, 12 de julio de 2015

Monumentos desaparecidos: La ermita de San Marcos el Viejo.

Hasta la desamortización de Mendizábal había en Cáceres y alrededores una gran cantidad de ermitas, según Benito Boxoyo una treintena, su auge era debido sobre todo a la devoción surgida hacia santos y santas especializados en determinados milagros o favores (San Benito, San Bartolomé, San Antón, Santa Ana, Santa Lucia, Santa Catalina o San Idelfonso entre otros). También contribuyó la proliferación de cofradías entorno a ellas, modelo de organización y cohesión social.

En primer término a la izquierda la desaparecida ermita de San Marcos (AHMC)

Además de la función religiosa y cultural propia de la advocación del santo titular, las ermitas tendrían una función de recogida, hospedaje y alimentación de viajeros y mendigos, sobre todo las que se hallaban en los caminos como la del Espíritu Santo, San Blas o la de los Mártires.

            Pocas son las que han perdurado hasta nuestros días como ermitas (como Las Candelas, el Vaquero o el Amparo), mientras que otras han sido transformadas en capillas, santuarios o iglesia (Santa Gertrudis, Lignum Crucis o la Virgen de la Montaña), y la inmensa mayoría están en ruinas y abandonas (San Jorge o San Vito) o han desparecido, entre ella la que nos ocupa.

La ermita de San Marcos el Viejo, apelativo que se le añadió para no confundir con la ermita levantada ya en siglos posteriores, en el  XVI, también bajo la advocación de San Marcos, y que hoy llamamos San Marquino, sita en el barrio de dicho nombre. La ermita de San Marcos el Viejo, se alzaba cerca de la llamada Fuente del Concejo, entre la Ribera del Marco y la muralla, a los pies de la Torre de los Pozos. En ese lugar, según la tradición, fue donde Alfonso IX, tras la reconquista definitiva de la ciudad, celebró la primera misa, el 25 de abril de 1229, festividad de San Marcos.

Ermita de San Marcos por Gustavo Hurtado 1896 (F.I.)

Era una ermita de pequeñas dimensiones, con una única nave en donde la luz entraba por unos vanos arquitrabados, techumbre a dos aguas, y ábside circular. Según Boxoyo “La capilla de San Marcos es de cosa de tres varas en quadro y en su Altar una devota, y bien egecutada Imagen del Santo, de escultura, y mucha antigüedad”.

En octubre de 1964 la ermita de San Marcos el Viejo, fue mandada derruir por el Ayuntamiento de Cáceres a instancia del arquitecto municipal, don Ángel Pérez, que tras comprobar el agrietado de sus paredes y su deterioro, estimó que aquella primera ermita de Cáceres, en desuso y abandonada, carecía de interés artístico que la hiciera digna de ser conservada.

Con aquel derribo se perdió otro pedazo de historia de la reconquista cacereña.

Gracias y hasta la próxima.

Escrito por: Jesús Sierra Bolaños

Fuentes Consultadas:
-“Noticias históricas de Cáceres.” Simón Benito Boxoyo.
-“Recuerdos Cacereños del siglo XIX” Publio Hurtado.
-“El desarrollo urbanístico de Cáceres (siglos XVI-XIX).” 
  M.M. lozano Bartolozzi.
-“Paseo por la eternidad.” Francisco Acedo Fernández.